Tras el estreno en directo de la quinta temporada de ‘Canelis & Dragonas’, el podcast de nuestra Mommie Dearest sigue siendo una cita semanal pero también mantiene la mirada puesta en el teatro
Su voz ya es algo inconfundible. La Caneli se ha consolidado en el mundo del podcast y ha sabido acercar esta nueva forma de hacer radio al universo travesti con Ay, La Caneli y Canelis & Dragonas, donde también otras artistas tienen la oportunidad de hablar y ser escuchadas. Pero no es lo único que ha conseguido colisionar esta artista zamorana, con Laca & Palomitas también ha sabido encontrar la manera de unir sus dos pasiones: el cine y el drag. Sus cada vez más esperadas proyecciones en el Cine Embajadores Río son toda una revelación de ella misma, una manera de compartir su amor por esas películas y disfrutarlas en comunidad. La presentadora está en un momento muy bueno de su carrera y se inclina cada vez más hacia el teatro, aunque sigue teniendo muchos sueños por cumplir.

Ya ha arrancado la quinta temporada de ‘Canelis & Dragonas’. ¿Qué te apetecía hacer diferente esta vez y qué podemos esperar de los próximos episodios?
LA CANELI: Si te soy sincera, esta temporada no me apetecía nada ponerme a hacer Canelis & Dragonas, pero yo me debo a mi público y he sacado fuerzas de donde no tenía para traer cada semana un episodio nuevo y creo que están quedando bastante bien. Arrancamos en directo con Miss Yokim y Saphira que fue una fantasía vivirlo a todas en La Mariqueen ese día. Pero después de la “presión” de la temporada pasada con toda la polémica y las cancelaciones, yo acabé exhausta, porque hay una cosa que tiene Drag Race España, en general, cualquier reality show, que es un fandom muy fuerte y muy guay cuando van cosas bien, pero también es un fandom muy tóxico. Sin embargo, yo tengo un lema que es: “pásatelo bien, hagas lo que hagas, lo importante es pasárselo bien y disfrutarlo”.
¿En qué te basas para elegir las invitadas para cada episodio?
C: Hablar de Drag Race es más una excusa que el verdadero motivo de hacer el podcast. Para mí, el motivo real es conocer a las compañeras de camerino, conocer las historias de personas que tengan o no plataforma, hayan salido o no en la televisión. Creo que son testimonios muy valiosos y que me encanta recoger en mi podcast para que, de alguna forma, quede grabado y registrado para la posteridad, tanto por las que vienen a hablar como por las que ya no pueden venir. Por ejemplo, Cristian de Samil y Manel Dalgó hablaron de muchas de sus compañeras ya fallecidas, de las que ya nadie se acuerda.
Quiero fomentar y traer a personas del artisteo queer y del transformismo un poquito más mayores, para que las jóvenes puedan conocer esas historias. También me baso mucho en mis amigas, la gente que quiero es, de alguna forma, la que me estimula y me gusta. Antes que travesti soy fan de travestis y del transformismo.
Tu podcast ya es toda una cita semanal para mucha gente. Además de una reunión de amigas con micro, ¿sientes que se ha convertido también en un espacio seguro para la comunidad?
C: Creo que esta pregunta yo no la debería contestar yo, sino la gente que escucha el programa, pero sí que noto que hay mucha gente que me escribe diciendo que le pasa lo mismo cuando compartimos algo en el programa. Hace ya un par de años que me hice visible con mi diagnóstico de VIH y en el podcast lo he hablado de todas formas y, hoy en día, hay chicos, que acaban de recibir su diagnóstico y no conocen a nadie, no tienen a nadie en su entorno que viva con esta realidad y se les ocurre acudir a mí. No sé si definirlo como un lugar seguro para la comunidad es algo muy grande, pero me parece bonito que quizás sea un punto de referencia de saber que si tienes un problema puedes acudir a La Caneli. De El Diario de Patricia a El Diario de La Caneli.
Con ‘Laca & Palomitas’ has demostrado que el cine y el drag se entienden de maravilla. ¿Qué te inspira del universo del cine y cómo lo llevas a tu drag?
C: Yo siempre digo que Laca & Palomitas es la mezcla perfecta de mis dos pasiones, el cine y el drag. Me inspiro mucho en las divas, en Joan Crawford, Bette Davis, Sara Montiel, Carmen Sevilla… Me gustan mucho estas, pero también me gusta una Bárbara Stanwyck. El cine clásico me encanta: Douglas Sirk, el cine setentero, ochentero, John Waters, Eloy de la Iglesia… No sé, soy una persona de gustos cinéfilos muy variados y es lo que intento llevar a las proyecciones. Tengo una lista muy grande de películas que me gusta compartir con todo el mundo porque, al final, estoy creando una tercera vía que es disfrutarlas en comunidad y en compañía.

El único género en el que creemos es en el cinematográfico. Si tuvieras que definirte como uno, ¿cuál elegirías?
C: Obviamente un melodrama a lo Douglas Sirk en technicolor. Yo me imagino entre Imitación a la vida, Escrito sobre el viento… Algo así, mucho technicolor. Pero, de repente, también te digo que una película así, un slasher, más ochentero que noventero. No tan Scream, más Pesadilla en Elm Street. Pero soy muy ecléctica en cuanto a cine y me lo trago todo, no me podría definir con un solo género. Lo ideal sería un The Rocky Horror Picture Show, que es todos los géneros a la vez.
Hace poco, en el Teatro del Barrio, te vimos explorar lo camp, pero no es la primera vez que te vemos sobre el escenario de un teatro. ¿Qué has descubierto sobre ti misma como artista en el teatro? ¿Qué diferencia hay entre actuar para un patio de butacas y hacerlo para una sala de fiesta donde se hacen eventos drag?
C: Creo que no hay tanta diferencia, porque subirse a un escenario de un teatro o subirse a un palé en un bar, para mí merece el mismo respeto, el público que te está viendo merece el mismo. Sí que es verdad que es diferente la energía que se crea, pero lo que la gente espera ver de ti yo creo que es lo mismo, yo he disfrutado ambas cosas y me quedo con las dos, para mí merecen el mismo respeto el aplauso de un público sentado en una butaca que el aplauso de unos maricones con unos cubatas en un bar de mala muerte.

Eres una señora muy semanal. Ahora también estás al frente del visionado de la segunda temporada de Dragula Titans, en La Mariqueen, un formato un poco distinto a Drag Race. ¿Qué te atrae de ese universo más oscuro y, quizás, menos mainstream del drag?
C: Me vi atraída porque mi partner in crime, Nave Misterio, fue quien me arrastró a este universo de Dragula. Yo no soy monster, lo tengo claro y siempre lo digo. Glamniss en la Monster Mash me acusó de hacer intrusismo laboral porque yo era una drag más señora y decía que dejáramos trabajo a las monsters. Yo siempre lo digo, monster es Nave Misterio, yo soy la chica en apuros de la película de terror, por eso creo que hacemos un buen tándem: vivimos juntes, somos pareja y, además, compartimos camerino. Animamos a la gente a venir, a crear esta comunidad monster, a que siga creciendo, que se siga estableciendo más aún.
Eres una de las travestis más trabajadora de este país: teatro, podcast, eventos, incluso televisión… ¿Hay algo nuevo que tengas entre manos que nos puedas adelantar? ¿Y algún sueño que aún tengas pendiente?
C: Las hay más trabajadoras que yo, pero sí que es verdad que es complicado, y eso que yo tengo la suerte de que el drag no sea mi principal fuente de ingresos. Pero ahora de repente La Caneli está creciendo como la espuma y compaginar todo a la vez, trabajo civil con mi drag, está siendo un viaje, vamos a dejarlo ahí, un viaje. Aunque espero no acabar “estando de
viaje”. El mundo del teatro me gusta mucho y creo que mi vía es tirar por esa por esa parte, porque mis ciclos de sueño son sagrados y prefiero un bolito de tarde. Me gustaría seguir con mi propio show teatral, No soy ningún ángel, que estrené el pasado julio en la Sala de Té, y exportarlo de alguna forma, quizá en la Mariqueen, no lo sé, veremos si suena la flauta. Y en cuanto a lo del sueño, me encantaría regentar mi propio local para hacer un café teatro y de repente montar una revista, mucho plumerío, traer a Manel Dalgó y a Cristian de Samil para que actúen todos los días, porque son un escándalo, y a todos los demás artistas que me encantan.
¿Con qué mensaje te gustaría despedirte de esta entrevista?
C: Que disfrutéis lo que hagáis, sea lo que sea, y ya está, que es lo bonito. Al final, nunca se sabe lo que vamos a estar aquí, no sabemos el tiempo que vamos a estar en el planeta Tierra, o cuando nos “vamos a ir de viaje”, pero que la estancia sea disfrutable y que hayamos pasado un buen rato. Me he puesto un poco seria, pero esa la vibra, ¿no? Yo quiero que todo el mundo esté de buena onda, de buen rollo, ya bastante jodido está el mundo con el genocidio, con el fascismo en auge… Por lo menos que lo que hacemos nosotras las artistas sea ese puntito de alegría en la vida.

